El buchón tiene amenazado el embalse de Tominé

El embalse de Tominé, en Guatavita, Cundinamarca, está conviertiéndose en una gran alcantarilla, ya que, la contaminación de los ríos Siecha y Aves, está desembocando en el embalse, haciendo que cerca del 70% de la represa se encuentre cubierta por una planta acuática llamada buchón, la cual sólo crece en aguas contaminadas.

El riesgo que representa el crecimiento del buchón en el embalse, no es sólo para la represa como tal, sino para los visitantes, ya que el crecimiento de esta planta favorece el aumento de la población de mosquitos y roedores, dos de los principales agentes de transmisión de infecciones.

Tradicionalmente, el embalse de Tominé ha sido escenario para numerosos campeonatos nacionales de navegación a vela, además de ser uno de los mayores atractivos turísticos de Guatavita por su inmensa riqueza paisajística. Es por estas razones que los habitantes de este muinicipio se encuentran preocupados por la situación de la laguna, ya que esta, además, es la fuente de empleo de cerca de 50 familias, que realizan paseos en lancha alrededor de la laguna, actividad que está en riesgo.

El buchón, que comenzó a crecer en el 2002, se extendió por todo el embalse y a pesar de que los habitantes del municipio han pedido que alguna autoridad ambiental frene su reproducción, es poco lo que se ha logrado.

La Corporación Autónoma Regional, CAR, advirtió sobre la necesidad de diseñar e implantar un programa urgente para retirar estas plantas, así como continuar con el programa de monitoreo del agua y de los ríos que son afluentes del embalse.