www.viajaporcolombia.com desde el Torneo Internacional del Joropo: Concierto en la Avenida 40

La noche volvió a vestirse de gala para los artistas invitados que con diferentes ritmos venían a homenajear el joropo y hacer bailar y porqué no, vibrar a los más de 30 mil asistentes a la Avenida 40, que desde tempranas horas de la noche abarrotaron esta importante vía de la capital metense.

Hanna, una artista local, oriunda de Villavicencio fue la encargada de abrir la noche con su presentación, con canciones de tipo romántico y otras de corte norteño, la artista metense empezó a calentar el ambiente. Además, esta interprete tuvo la oportunidad de cantar canciones de la difunta artista tex-mex, Selena.

Después llegó Kema, un grupo con una fusión de sonidos tropicales, rock y pop, que emocionó a la gente que se olvido de la lluvia que amenazaba y se entrego por completo a la musica, Yuri Toro, vocalista del Grupo afirmo que “la gente de Villavicencio tiene una chispa única que te obliga a dejar lo mejor en el escenario”.

El siguiente turno fue para el cartagenero Jerau, intérprete de canciones ya reconocidas por jóvenes y adultos, que al final de su presentación, que hizo subir a los asistentes encima de las sillas, no dudo en afirmar, que “venir al llano es una experiencia deliciosa, porque la gente me ha abierto sus corazones y lo más importante es que le estamos abriendo puertas a los artistas nacionales”.

Al vallenato Meter Manjares, conocido como “El Papá de los amores” llevó al punto del delirio a las personas que abarrotaron la avenida 40. con sus vallenatos “arrebatados” invito a todos los presentes a manifestarse con la paz y agradeció a la ciudad, que según el artista, “es muy parecida a mi Valledupar, entonces me siento como en casa”.

La sorpresa de la noche fue la Venezolana Scarlet Linares que con su Joropo “feminista” logró que la gente estallara de alegría. “Colombia es hermosa, su gente es hermosa, entonces yo traigo el joropo a esta gente hermosa de Villavicencio”, afirmó la artista.

El cierre le correspondió al dominicano Eddy Herrera, que con su merengue, a pesar de que eran las 3:00 de la mañana, llegó al clímax de emoción en el lugar. A las 4:00 de la mañana la gente se fue para sus casas, algunos borrachos, otros sobrios, pero todos, felices.